viernes, 27 de agosto de 2010

Zonas de Vida y Habitas de Venezuela.

El hábitat es el ambiente que ocupa una población biológica . Es el espacio que reúne las condiciones adecuadas para que la especie pueda residir y reproducirse, perpetuando su presencia. Un hábitat queda así descrito por los rasgos que lo definen ecológicamente, distinguiéndolo de otros hábitats en los que las mismas especies no podrían encontrar acomodo.

Las zonas de vida, por su parte, son una división mayor de la superficie terrestre, un antecedente de los actuales biomas.

Dada la ubicación geográfica de Venezuela en el norte de Sudamérica, donde se recibe la influencia del Océano Atlántico y del Mar Caribe, y con la existencia de grandes cordilleras a lo largo de nuestra costa, en oriente (en la zona de los tepuyes), y en occidente (en la frontera con Colombia), se produce una variedad de paisajes o zonas de vida, donde se alojan todas las especies de fauna silvestre y de la flora venezolana.


A la vez, estas zonas de vida están recorridas por arroyos y ríos, y contienen lagos y ciénagas, que convierten al país en una verdadera fábrica de agua dulce, aquella que justamente es tan escasa en otras regiones del planeta, haciéndola apta para el desarrollo de selvas, de bosques, de pastizales, de sembradíos.

Y en esta tierra de gracia, se desarrolla la variedad de vida. Existen aproximadamente 15.500 diferentes especies de plantas; es decir, somos muy ricos en helechos, en orquídeas, en bambúes, en gramíneas, en árboles. La riqueza también se extiende a los animales silvestres, donde hay aproximadamente unas 1200 especies de peces, unas 300 especies de anfibios e igual número de reptiles, unas 1300 especies de aves y unas 350 especies de mamíferos. Los insectos también son muy numerosos, probablemente con más de 150.000 especies! Otros animales también abundan.


Los hábitats responde a ciertas características climatológicas, ambientales y geográficas. De esta manera se han formado diferentes tipos de hábitats como los siguientes: predera, bosque, desierto, montaña, y entre otros mas, sabana.
 
Las prederas es un bioma cuya vegetación predominante consiste en hierbas y matorrales. El clima es templado, entre semiárido y húmedo; hay una estación cálida y, generalmente, otra estación fría en invierno.
 
De las praderas de América del Sur son originarios roedores y otros animales pequeños: vizcachas, maras y cuises, armadillos como los peludos y mulitas, comadrejas, lagartijas y zorros. Entre las aves se encuentran ñandúes, perdices americanas, lechuzas, patos, martinetas, chajáes, teros, chimangos y caranchos. De las especies de pájaros que pueblan los sitios arbolados se distinguen horneros, cardenales, calandrias, benteveos, tijeretas, churrinches y picaflores. En las regiones de pajonales abundan los pechos colorados, las cachirlas y los chingolos.
 
Es importante mencionar que la fauna de la pradera cumple un papel fundamental en la preservación del equilibrio natural, esencial para la cadena alimentaria. Numerosas especies de animales excavadores de las praderas, al remover el suelo, modifican el contenido mineral de éste y posibilitan el crecimiento de las especies vegetales. Bajo tierra actúan las lombrices y otros invertebrados que, además, oxigenan el suelo, junto con millones de bacterias que descomponen los residuos orgánicos.
 
Por otro lado, los bosques son un área con una alta densidad de árboles. Estas comunidades de plantas cubren grandes áreas del globo terráqueo y funcionan como hábitats animales, moduladores de flujos hidrológicos y conservadores del suelo, constituyendo uno de los aspectos más importantes de la biosfera de la Tierra. Aunque a menudo se han considerado como consumidores de dióxido de carbono, los bosques maduros son prácticamente neutros en cuanto al carbono, y son solamente los alterados y los jóvenes los que actúan como dichos consumidores. De cualquier manera, los bosques maduros juegan un importante papel en el ciclo global del carbono, como reservorios estables de carbono y su eliminación conlleva un incremento de los niveles de dióxido de carbono atmosférico.
 
El manejo de los bosques naturales puede tener varios objetivos: la producción de madera y otros productos forestales; la protección de la cuenca hidrográfica; y, la conservación de la biodiversidad. Es por esto que su manejo debe estar ecologicamente equilibrado en pro de la conservacion ambiental.
 
Las montaña, por otro lado, es una eminencia superior a 700 metros respecto a su base, es decir, una elevación natural del terreno. Las montañas se agrupan, a excepción de los volcanes, en cordilleras o sierras.
 
 
Las características fundamentales para considerar un terreno montañoso son el clima y la vegetación. El clima de montaña es más frío y húmedo que el del llano, puesto que la temperatura desciende a un ritmo aproximado de 5º cada 1 km de altitud y las lluvias van aumentado con la altura, debido al llamado "efecto pantalla", si bien es frecuente encontrar en las zonas montañosas vertientes más húmedas (expuestas a vientos húmedos), frente a las más secas, en las que esos mismos vientos han perdido la humedad por elevación y tienden a absorber la existente en el suelo, fenómeno conocido como "efecto Föehn"; tal es el fenómeno que se produce en los Pirineos, donde su vertiente norte es más húmeda que la española o sur. La vegetación en montaña se encuentra escalonada o en pisos. En los pisos inferiores podemos encontrar vegetación similar a la del llano circundante pero a medida que se asciende van apareciendo especies más higrófilas y más resistentes al frío; tras las últimas especies arbóreas aparece la pradera alpina seguida del roquedo e incluso la nieve perpetua. Las especies presentes en cada uno de estos pisos y la altitud a la que podemos encontrarlas varían según los continentes y también con la latitud, pues no es lo mismo una zona montañosa en zonas subpolares que en zonas tropicales.
Las montañas Rocosas reciben una cantidad moderada de precipitaciones en forma de lluvia, sobre todo durante los meses de invierno. Las praderas cubren los niveles inferiores y dan paso a grandes bosques de coníferas. Por encima de la zona arbolada se extienden pastizales y arbustos aislados. Las cimas de los picos tienen escasa vegetación y algunos están cubiertos de nieve y hielo durante todo el año.

En cuanto a los Desiertos, estos se definen como la zona terrestre en la cual las precipitaciones casi nunca superan los 250 milímetros al año y el terreno es árido.



Un desierto es un ecosistema que recibe pocas precipitaciones. Tienen reputación de tener poca vida, pero eso depende de la clase de desierto; en muchos existe vida abundante, la vegetación se adapta a la poca humedad y la fauna usualmente se esconde durante el día para preservar humedad. El establecimiento de grupos sociales en los desiertos es complicado y requiere de una importante adaptación a las condiciones extremas que en ellos imperan. Los desiertos forman la zona más extensa de la superficie terrestre: con más de 50 millones de kilómetros cuadrados, ocupan casi un tercio de ésta. De este total, 53% corresponden a desiertos cálidos y 47% a desiertos fríos.

En el desierto sólo logran sobrevivir algunos animales: lagartijas, serpientes, arañas, lechuzas, alacranes, ardillas, buitres, coyotes, etc. Al igual que en la fauna, sólo se adaptan algunas plantas. Éstas se protegen de los animales con espinas y con gruesas capas de piel. Algunas de ellas son: cactus, palmeras, nopales y diversos arbustos y plantas de los oasis.

Por ultimo (aunque existen otros habitas), se encuentran las sabanas, que son llanuras ubicadas en climas tropicales en la cual la vegetación se encuentra formando un estrato herbáceo continuo por gramíneas perennes, salpicada por algún árbol, arbusto o matorral individual o en pequeños grupos de talla inferior a 10 m. Normalmente, las sabanas son zonas de transición entre bosques y estepas.

Las sabanas propiamente dichas, son biomas generalmente situados en latitudes intertropicales y raras veces subtropicales. Las sabanas de África son típicas de unas de las más húmedas, siendo la más famosa la del Serengueti que está en Tanzania. Las sabanas de los Llanos colombo-venezolanos constituyen las típicas sabanas de clima Aw (o clima de sabana).


Las sabanas se aracterizan por tener una estación o período seco, la cual afecta a las plantas y al suelo; poseen suelos escasamente fertiles, por el lavado o lixiviación de las sustancias nutrientes; una estación templada, seca y otra calurosa y lluviosa; la conforman plantas de hierbas y no son frecuentes las concentraciones arbóreas, salvo en las zonas más favorables o junto a los ríos (selva de galería). Ademas existendiferentes especies de mamíferos, pájaros e insectos. Cabe destacar que las sabanas de los Llanos colombo-venezolanos constituyen las típicas sabanas de clima Aw (o clima de sabana) predominante en nuestro estado.

La diversidad geográfica del territorio nacional se hace patente al dividirlo en regiones naturales. Concretamente, en Venezuela pueden diferenciarse hasta nueve regiones, a saber: Los Andes, Lago de Maracaibo, Insular, Cordillera Central, Cordillera Oriental, el Sistema Deltaico, Los Llanos, Sur del Orinoco, y el Sistema Coriano.

Para concluir, es de suma relevancia destacar que en cada región existen hábitats diferentes que cambian constantemente por el clima o por la influencia humana. En el mundo, hay tipos de hábitats que albergan variadas especies de animales y de vegetación. Para una bacteria, un charco en alguna ciudad puede ser su hábitat, para un león su pradera en el África, también pasando por un oso en una montaña de Norteamérica o una serpiente en un pantano de Asia. Todos éstos son hábitats de varios ecosistemas que pertenecen a un lugar específico, en el cual el clima determina y hace posible que la vida animal y vegetal se reproduzca de una manera particular y estable en la cual se den las condiciones para que la vida se produzca y reproduzca.

Publicado Por:

- Bermúdez Bresmar.
- Delgado Arturo.
- Escalona Annys.
- Lamus María.

¡DIOS LOS BENDIGA!

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